Julio Sarmiento, agente del Gobierno de Cuba, detrás de las
movilizaciones estudiantiles, Por Olga Mas Tamargo.
Hace
mucho tiempo dejé de creer en las casualidades. Y en el caso de las
manifestaciones estudiantiles en Chile, hay demasiadas casualidades que apuntan
a la mano negra del castrismo para revolverle el patio a Sebastian Piñera.
Julio
Sarmiento, cubano, de 28 años , “emigrado” a Chile en 2002, se ha convertido como por arte de la magia “cástrica” en destacado “activista estudiantil” en este
país , hasta ocupar en 2010 la Presidencia de la FECH (Federación de Estudiantes
de Chile).
Casualmente
lo sustituye en el cargo al frente de los estudiantes chilenos, una joven de
especial belleza, por casualidad su
novia, que también milita en el Partido
Comunista de Chile ( hija de dos antiguos militantes del PC, Reinaldo Vallejo y
Mariela Dowling) y a la que los medios
cubanos han hecho una desproporcionada campaña publicitaría
convirtiéndola en una “heroína de los tiempos modernos”.
Sarmiento
podría ostentar el record de ser el primer exiliado cubano, que
milita en el Partido Comunista del país
de acogida. Raro, raro, raro. No sería
nada extraño que todavía militara en la organización comunista de Cuba ,
con una baja temporal por encontrarse en “misión internacionalista”.
Según un
artículo de Radio Santiago, esta “perla cubana” nació en Santa Clara el 29 de
enero de 1983. Vivió en Cuba hasta los 18 años. Comenzó desde muy joven su
actividad como dirigente estudiantil ( en plan cubano subordinado a las
orientaciones de la dictadura), fue egresado del Preuniversitario de Ciencias
Exactas Ernesto Ché Guevara y participó en los funerales del Ché Guevara
(todo un historial). Empezó a militar en
la Unión de Jóvenes Comunistas en 1999,
ocupó cargos de dirección y se
destacó en “las Brigadas Juveniles de Trabajo.
En 2002
“se va” para Chile “por razones
familiares” (se ruega información) donde empieza a residir de manera
permanente. Ingresa en la Facultad de
Medicina en 2004 (con lo caros que son
los estudios en Chile, según reivindican los estudiantes) e inmediatamente
comienza a involucrarse en la “política” universitaria. ¿Casualidad? Para nada, sin dudas un “retoño” muy bien
sembradito en el seno estudiantil por
los Hermanos Castro y financiado por ellos.
Empezó un ascenso vertiginoso en la política estudiantil chilena, muy
singular, teniendo en cuenta su origen cubano y la “poca” experiencia que
tienen los jóvenes de la isla bajo la dictadura castrista en estas “luchas
universitarias”. Llega a la Presidencia de del Consejo de Estudiantes de la
Salud en dos oportunidades, luego pasa a ser Secretario Ejecutivo de la
Federación de Estudiantes de Chile y Senador
universitario.
En 2005
empieza a militar en las juventudes comunistas de Chile ocupando el cargo
de Secretario de Educación y de Masas, a
nivel de base y en la Dirección Regional (DEC). En 2010 llega a la Presidencia
de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH) tras alcanzar
mayoría la mayoría de los votos como
representante de la Lista G “Estudiantes de Izquierda a la FECh”.¿Otra
Casualidad?.
Su novia
Camila Vallejo, a la que cubre como un guarda espaldas en las manifestaciones
juveniles, lo ha sustituido en la Presidencia de la FECH. Es evidente que no era políticamente correcto que Julio
Sarmiento, un cubano, encabezara este movimiento, hubiese sido demasiado evidente, así que tuvo que pasar a la sombra por
“orientaciones” de sus patrocinadores y preparar el relevo. Con sólo 23 años, la bella Camila, militante
comunista, se ha convertido en una “prometedora” figura política sembrada a
largo plazo. Camila Vallejo reconoce en sus declaraciones que ha aprovechado su
belleza para atraer la atención de los medios de comunicación y difundir su
mensaje. Tampoco éste debe haber sido un atributo casual. Con 771 votos -de un
total de 8994 sufragios, en un universo de 21547 estudiantes- Vallejo se
convirtió en la más votada entre los 25 candidatos para integrar la Fech, lo
que le otorgó la Presidencia en noviembre de 2010. Los Castro no dan puntada
sin hilo.
Julio
Sarmiento fue uno de los puntales para la elección de Camila, como su pareja la
ayudó a solucionar uno de los principales problemas que tuvo la candidatura de
la estudiante de Geografía: provenir de una facultad pequeña.
“Sarmiento
era de una facultad grande, había sido dos veces Presidente del centro de medicina, Senador universitario y era
carismático”, cuenta un ex compañero de la lista de Vallejo, sobre la
influencia del dirigente en la competencia por la federación.
El
periódico Granma, medio oficial de Partido Comunista Cubana, resalta la
personalidad de Camila Vallejo, y señala que
la joven “se ha convertido en símbolo de la lucha por la resistencia
estudiantil”. Alaba su resistencia a
cualquier solución negociada, destaca su carácter fuerte que “lleva en sí todo
el reto de liderar el movimiento de los estudiantes que mantiene en jaque al Gobierno
de Sebastián Piñera”. Aquí se le sale el plumero al Granma.
Se
destaca que la dirigente estudiantil
“combina belleza e inteligencia, rompiendo mitos y ganando adeptos, al punto de
perfilarse desde ya en una importante figura política” y agrega: “Sobre esta
joven ha caído la ira de los más retrógrados y conservadores, desde el instante
en que plantó cara al Gobierno chileno por la justa causa de sus colegas. Ha
puesto el dedo en la llaga, no solo en las inequidades que plantea el modelo
educativo de su país, sino en las que afectan a toda la sociedad,
convirtiéndose por eso en objeto incluso de amenazas de muerte”.
El medio
oficial de la dictadura comunista de Cuba hace de Camila, “la militante de las
Juventudes Comunistas desde hace cinco años, y vocera también de la
Confederación de Estudiantes de Chile”,
una especie de profetisa, de mesías femenina “Camila Vallejo tiene ante
sí el desafío de guiar a las jóvenes generaciones de una sociedad que se
declara democrática, pero vive aún bajo los vestigios de la dictadura
pinochetista, señala Angélia Mora y
agrega : “Es indudable que el movimiento
estudiantil de protestas a favor de mejor calidad de la educación está
penetrado y manipulado por el comunismo, esa filosofía negadora de los derechos
humanos, enemiga de la clase obrera que dice defender, negación absoluta de la
libertad y fundamento del descalabro económico de los países donde ha
establecido su dominio. El Granma lo confirma.”
Pero más
aberrante aún es la comparación que medios cubanos hacen de Camila Vallejo con
Julio Antonio Mella, a la que Cubadebate
califica de novia a destiempo
del comunista cubano. Lo extraño es que la prensa cubana no mencione a su
hombre en Chile, Julio Sarmiento, el comunista que está detrás de esta “estrella” designada por ellos para “abrir
las Grandes Alamedas”.