Meditaciones importantes. Llámese alternancia en el poder, cambio de mano o desalojo, lo claro es que Chile necesita cambiar de mano en la conducción del Estado, porque los que hoy ejercen el poder lo hacen mal, porque no tienen ideas que permitan salir adelante al país y porque se encuentran es un corrupto estado de descomposición.
Escucharemos muchas argumentaciones de la concertación para quedarse en el Gobierno, pero ya sabemos que todas ellas son falaces y que se basan en la explotación de los sufrimientos de un pueblo que creyó en las promesas que le hicieron y que ha resultado mortalmente defraudado con las engañifas del oficialismo.
Oímos a diario las delirantes declaraciones, tanto desde el Gobierno como de los partidos que lo apoyan, ponderando lo exitosas que han sido sus administraciones, pero claro, ocultando que se lo han robado todo inclusive los sueños y esperanzas de los que creímos en su discurso “progresista” y libertario.
La inseguridad pública, el desempleo permanente de grandes falanges de ciudadanos, una educación deficiente, una salud vergonzosa, la sensación de injusticia permanente, los escándalos cotidianos, la inconciencia y deshonestidad con que se manejan los asuntos públicos, son solo algunas de las demostraciones de la incapacidad de nuestros gobernantes.
El majadero discurso de descalificaciones, la fastidiosa siembra de divisiones y odiosidades, el ocultamiento de las realidades, la denegación de Justicia, la creación de expectativas que siempre han resultado defraudadas, la promesa fácil, nos señalan a una agrupación de improvisadores carentes de ideas y realismo.
La falsificación de nuestra historia, para perseguir a quienes nos liberaron del yugo que ellos trataron de imponernos y la glorificación de aquellos que intentaron subyugarnos nos da cuenta de falsarios que recurren a cualesquier método, por inmoral que este sea, para aferrarse a las posiciones de poder adquiridas.
La falta de propuestas racionales para solucionar los problemas de la población ha hecho que centren su agenda en los cambios políticos, esos que creen les ayudaran a consolidad en poderío que han conseguido o conseguir en el extremismo los aliados que les permitan seguir “encaramados” en los hombros de los chilenos.
Han resaltado una presuntiva “superioridad moral” sobre sus adversarios, que es contradicha con el apoyo que han dado a los grandes genocidas rojos del mundo, o con su silencio ominoso, y con la rapiña miserable con que han atacado los fondos de los chilenos.
El cambio que Chile requiere no es un eslogan más, es la graficación, en pocas palabras, de una necesidad para que el país deje la modorra que le mantiene adormecido y recupere la senda de desarrollo que se ha extraviado en estos casi 20 años de malos Gobiernos que nos ha proporcionado el oficialismo.
Han recurrido a las más repugnantes descalificaciones contra aquellos que han manifestado posiciones distintas a las del conglomerado oficial y una campaña de engaños con referencia a sus opositores, creemos que con la esperanza secreta que los ciudadanos olvidemos la realidad de lo ocurrido durante estos largos años.
Chile y su pueblo no se merecen una quinta administración de esta agrupación de fracasados, por eso conminamos a todos nuestros compatriotas a ponerse a trabajar para terminar con esta verdadera dictadura disfrazada de democracia con las armas que nos da la Ley, nuestros votos serán suficientes para enterrar a la corruptela que se ha enseñoreado en el país.
