HAY…NUESTRAS AUTORIDADESLa Autoridad, por actos propios, ha perdido toda la credibilidad que les daba estar en la Presidencia, y, talvez tiene la misma importancia ha demostrado tener un “corto-placismo” abismante, que solo les lleva a preocuparse de los problemas que estallan por todos lados.
El Programa Presidencial que nos presentaron era una muy buena declaración de intenciones o una excelente interpretación de los anhelos de los ciudadanos, pero, ha quedado claro que cuándo se ven con la guitarra en las manos, sencillamente no la saben tocar.
Han suplantado las necesidades y no han considerado medidas técnicas, buscando solamente solucionar los problemas con “politiquería”, actos de pirotecnia efectista o grandes show destinados a distraer a la opinión pública de las verdaderas monstruosidades que han hecho.
Sin duda el Transantiago y la situación de contaminación que afecta a la capital, y amuchas ciudades del país, demuestran a las claras que no ha habido voluntad de realizarlas, que no tienen mentalidad de equipo, que están improvisando y que los informes técnicos ni los consideran.
Las protestas de los pingüinos, universitarios, profesores, e incluso apoderados solo demuestran un “voluntarismo” inmenso, pero en nada conducen a mejorar la calidad de la educación, terminar con las inequidades o a mejorar los planes de estudio del sistema, que son aptos solo para el siglo pasado.
La brutal carga tributaria a la que se insiste en mantener a las personas solo hace más grandes las diferencias, pues mientras a los más ricos les permite vivir con gran tranquilidad, a los mas pobres y a las clases medias les pauperiza de manera espantosa, ampliando de manera inmensa las brechas sociales.
Si cuándo no estaban “cansados” ni dedicados a los procesos electorales que se avecinan solucionaron las extremas condiciones en que vive parte importante de la población, ahora, que tenemos estos procesos en marcha, es decir se acaba el Gobierno, solo ilusos pueden soñar con que lo harán.
Creemos que estos cuatro años, en que han contado con todo para hacer un excelente Gobierno, simplemente se deben considerar como perdidos, lo que es grave, sobre todo considerando que nos hemos ido alejando de la posibilidad de alcanzar el desarrollo que se requiere.
Ya ni siquiera sus “compañeros” les creen, lo que queda demostrado claramente con la oposición que encuentran en las filas de la Concertación, en la que pareciera que todos se están dedicando a salvar sus “posiciones” personales ante la inminente zozobra del oficialismo.
Las elecciones que se avecinan, este año de Alcaldes y Concejales, el próximo de Parlamentarios y Presidente, nos dan la oportunidad de “pasarles la cuenta” de tanta ineptitud, incapacidad y corrupción, votando por otros, es improbable que otros lo hagan tan mal.
