El pacto de la Concertación con el Partido Comunista para las elecciones municipales, un pacto por omisión que asegura al PC la obtención de algunos alcaldes, debiera hacer pensar a muchos chilenos que hasta el momento han votado por la alianza oficialista.
Los comunistas, al igual que muchos socialistas, siguen siendo marxistas, lo sean declaradamente o encubiertamente, lo que implica que son antidemocráticos y que utilizan el esquema electoral solo por conveniencia coyuntural.
Su historia, su ideología, su actuar, nos señala que cuándo ven que no pueden imponer sus ideas, simplemente recurren al terrorismo y a las guerras de liberación, nombre con el que disfrazan su revuelta totalitaria.
El eslogan de este nuevo pacto debería ser “Juntos podemos seguir destruyendo y saqueando al país”, pues no hay duda que quien se alía con los corruptos es porque quiere agarrar algo.
Hoy se celebra un nuevo aniversario de la muerte de la “pasionaria”, Gladis Marín M., a quien esperamos Dios haya perdonado sus permanentes prédicas de odio y sus intentos por aherrojar nuestras libertades.
Es interesante, sobre todo viendo la intransigencia y permanencia en el tiempo de los intentos de dominio rojos, ver que los “tontos útiles” de antes siguen siendo los “compañeros de ruta” actuales.
Votar por la Concertación
Es votar por los comunistas.