Informe del
gobierno de Piñera proyecta la amenaza anarquista que enfrentará Bachelet.
La consolidación de una nueva
guerrilla urbana anarquista; un anticoncertacionismo como tendencia y
advertencias sobre el "postanarquismo contraciudadano" son parte de
las conclusiones finales que recoge un documento de fin del gobierno de
Sebastián Piñera, realizado por salientes analistas de La Moneda, al que
accedió La Segunda.
El informe intenta describir el
"estado de situación" que existe en el trabajo de monitoreo de este
tipo de activismo, mostrando las distintas tendencias, redes y proyecciones de
estos grupos.
En 30 láminas, contiene fichas sobre
el ingreso a suelo patrio de miembros del movimiento ácrata de Argentina,
Bélgica, España, Italia, Brasil, Suiza, Francia, México, Austria y Ecuador
, todos fotografiados, pero sólo algunos con nombres y apellidos.
Quienes sí cuentan con
identificaciones completas, como nombres y lazos internacionales, son unos 50
miembros de distintos grupos chilenos, considerados entre lo más activos y
cuyos nombres omitimos en resguardo de los derechos de privacidad y la
presunción de inocencia.
También se hace presente que la
mayoría de los anarquistas no abraza la vía violenta, no obstante en general no
la repudian.
La evolución
Como buen "documento
final", resume lo que se considera la historia fidedigna del anarquismo
moderno.
Según los analistas, Marcelo
Villarroel Sepúlveda, Juan Aliste Vega y Freddy Fuentevilla Saa fueron, son y
serán el referente obligado del "anarquismo insurreccional .
La proyección se la
"ganaron" como formadores del intransable Kolectivo Kamina Libre
(1996), cuyos miembros prefirieron continuar en la cárcel, antes de firmar un
documento gubernamental de 1997, que daba indulto a cambio de manifestar
arrepentimiento y compromiso de dejar la vía armada.
Para salir utilizaron el
hostigamiento constante a través de huelgas de hambre, ataques a cámaras de
seguridad, locutorios de visitas e instrumental de los penales, formando, de
manera paralela, redes sociales con el fin de dar visibilidad a sus acciones y
así acelerar el término anticipado de sus condenas.
Por ejemplo, tendieron lazos con
movimientos afines a la causa anarquista, simpatizando con los animalistas (se
hicieron vegetarianos y dejaron de usar cuero), y realizaron guiños al
mundo "ancestral", como cambiar en sus escritos las "c" y
"qu" por la "k", por ser más agresiva y de uso
"mapuche".
Poco antes, Villarroel, Rodolfo
Retamales y Pablo Morales habían sido expulsados del Mapu-Lautaro tras una
"Huelga de Militancia" , haciendo ver que no creían en un poder
cupular, sino que en la horizontalidad de las relaciones. Fue así como se
pusieron a disposición de expresiones antisistémicas e hicieron ver que no
"exigían" "salir en libertad", sino que "salir a la
calle", pues para ellos el mundo capitalista es de
"dominación" y no de libertad.
El esfuerzo rindió frutos: tendieron
puentes con anarquistas argentinos y fueron visitados en la Cárcel de
Alta Seguridad por la bonaerense Organización Cruz Negra.
Pocos años después de " salir a
la kalle ", un grupo de ex Kamina Libres protagonizaron el asalto al Banco
Security (2007), donde murió el cabo Luis Moyano. Fuentevilla y Villarroel
fueron detenidos en Argentina (2008), donde tenían redes de apoyo y se
consolidaron como símbolos actuales del movimiento anticarcelario.
Según fuentes del anterior gobierno, todo
lo que acontece hoy en el mundo insurreccional anarquista se relaciona, aunque
sea parcialmente, con algún ex Kamina Libre .
El primer anarquista
puro sorprendido asaltando.
De esa vía violenta e
internacionalista (al estilo griego) habría sido tributario Sebastián
Oversluij , quien murió en el frustrado asalto al BancoEstado de diciembre
pasado. Según los analistas, su importancia radica en que es "el primer
anarquista puro (sin pasado como militante subversivo) que actúa en un asalto
bancario".
Respecto de él se dice que fue pareja
de Tamara Farías Vergara, sobrina de los hermanos Vergara, en cuya
memoria se realiza el Día del Joven Combatiente. Hoy ella es investigada como
supuesta autora de un disparo a mansalva contra un guardia de una sucursal del
mismo banco el 21 de enero pasado.
Según se señala, la vía elegida por
Oversluij es consecuencia del potenciamiento del "anarquismo insurreccional",
tras el fracaso del Caso Bombas.
"Generó en los imputados y en
sus redes de apoyo sensación de impunidad, reforzando su moral", indicaron
las fuentes.
De hecho, se vivió una proliferación
de artículos triunfalistas en la web, aumentando su "atractivo".
Se consolidan FAI y FRI.
Para los ex analistas de palacio, casi
toda acción subversiva relevante hoy tiene el sello FAI y/o FRI; es decir,
de la Federación Anarquista Informal o del Frente Revolucionario Internacional,
respectivamente, que sirven como método de comunicación y de validación de las
actividades insurreccionales.
Ellas tendrían, por ejemplo, la Red
Traductora de Contrainformación, en la que se intercambian pensamientos,
material ideológico, atentados y actividades en 13 idiomas.
Por estos días celebran atentados en
Brasil, Indonesia, Buenos Aires y Glasgow y, hasta hace poco, un ataque de
julio de 2013 en Chile a una sucursal de BancoEstado cercana a la ex
Penitenciaría, en "honor" al condenado Hans Niemeyer.
El verdadero problema:
el ataque postanarquista al ciudadano.
Uno de los grandes problemas que
tienen los organismos de seguridad para lidiar con el anarquismo es que la
" vocería representacional no existe "; es decir, cada uno de
los "kombatientes" se presenta a sí mismo a través de sus acciones,
en una " nueva guerrilla urbana nihilista " (no cree en el
bien ni en el mal, pues la moral sería un "constructo" social
utilizado como "dispositivo de dominación").
Por lo tanto, ser reconocido por un
organismo internacional no limita a quienes no son reconocidos, a pesar de que
granjea visibilización, tal como sucedió con el Frente Internacional
Revolucionario/Comando Insurreccional Aracely Romo (atentó en las cercanías
de TVN en contra de los "periodistas-policías", que mostraron el cuerpo
sin vida de Mauricio Morales) y con el Comando 8 de Diciembre, que se
atribuyó explosiones en tres bancos.
Un segundo problema es la radicalización
del postanarquismo y la política contraciudadana; es decir, el ataque
contra la persona común y corriente, considerada por los más extremos como
seres "sumisos", cómplices del "Estado policial".
Así, por ejemplo, ya han sido
atacados vehículos particulares (en La Reina) y hay amenazas contra
escuelas, consideradas como centros de "domesticación" del
"maldito ciudadano".
Como consecuencia, analistas del
anterior gobierno esperan que se repitan ataques de tipo incendiario contra
objetos simbólicos del "ciudadano inconsciente", como árboles de
Navidad (ya sucedió dos veces en Estación Central -2012 y 2013- y una vez en
Hualqui en 2013).
Anticoncertacionismo y
dos 11s.
Según el informe al que accedió «La
Segunda», el desprecio del anarquismo hacia la Alianza por Chile es de
perogrullo, pero es igualmente fuerte en contra de la antigua Concertación y
hasta, comenta un analista, podría hacerse extensivo contra el PC al formar
parte de la Nueva Mayoría.
Si hasta el gobierno de la antigua
Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas es visto por algunos como un
"capitalismo de Estado" y como una "forma de dominación".
Y aunque el blanco preferente de
bombas durante el anterior gobierno de Bachelet y en el de su sucesor fue el
sistema bancario, se advierte que el "anticoncertacionismo"
anarquista se podría hacer patente. Consideran por lo mismo un aviso el
escupitajo recibido por la actual Jefa de Estado en mayo de 2013, por parte
de Elías Salvador Sanhueza Campos, en plena campaña presidencial (del agresor
consta una detención en 2011 en el contexto de una marcha en apoyo a los
imputados del caso bombas) .
Los hitos del año que
pueden ser usados como "vitrina".
El trabajo de análisis incluye una
proyección de fechas o hitos claves del año que podrían ser utilizados por los
grupos anarquistas para marcar presencia pública.
En este contexto, se hace ver que las
marchas estudiantiles serán un espacio para la "incorporación
oportunista" de elementos insurreccionales: a mayor masividad de las
marchas, se enfatiza, más probabilidad de que estos grupos ataquen con
impunidad.
Advierten que las fuerzas policiales
también debiesen prepararse este año para enfrentar dos 11s: el típico
aniversario del golpe más el 11 de diciembre, cuando se conmemore la
muerte de Sebastián Oversluij.
Y si de fechas conflictivas se trata,
el 22 de mayo podría haber desórdenes por el fallecimiento de Mauricio
Morales; también "con seguridad" habrá acciones de solidaridad
durante el enjuiciamiento en España contra los chilenos Francisco Solar y
Mónica Caballero (por el bombazo en la Basílica del Pilar) y lo mismo
respecto del juicio contra la supuesta atacante del BancoEstado, Tamara
Farías.
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Clasificaciones básicas.
Aunque existen numerosas
clasificaciones y subclasificaciones anarquistas (subversivos, libertarios,
insurreccionales y un largo etcétera, que admite combinaciones), una fórmula
que trabajó el gobierno de Piñera fue agruparlos en Tardoanarquistas; Anarquistas
de Origen Puro y Posanarquistas.
Tardoanarquistas : Nacidos durante la
época del gobierno de Pinochet, son ex militantes combativos de agrupaciones
como el Mapu-Lautaro, el MIR (y sus variaciones) y el FPMR. Entre sus
principales aportes se encuentra haber potenciado el movimiento intercarcelario
y capacitar en proselitismo subversivo .
Puros : Secundarios y universitarios
, en una mezcla entre seguidores "inarticulados" y otros
ideológicamente sólidos.
Posanarquistas : Sería una tendencia
"sólidamente establecida", que apunta hacia una radicalización mayor
a la actual, convocando a jóvenes nihilistas y desencantados y a
"universitarios de años iniciales".
Cada uno de ellos puede pasar o
priorizar alternativamente alguna de las siguientes nueve fases, siempre según
el informe de situación, al que accedió La Segunda.
Anticapitalista, antiautoritaria,
antipolicial, antisocial, contracivilizatoria, anticarcelaria, animalista,
anticlerical y primitivista o anarcoprimitivismo .
Estos últimos sostienen que el paso
desde la recolección a la agricultura implicó el inicio de la estratificación
social, impulsando un sistema de dominación, por lo que bogan por una
desindustrialización y vuelta -con distintos grados, pues hay subtendencias- a
la etapa salvaje.
Tomado de Diario La Segunda.