Desde el oficialismo se ha iniciado una campaña para intentar convencernos que los ataques contra la Primer Mandatario son provocados por el machismo subyacente en nuestra sociedad, haciéndose los desentendidos sobre los magros resultados de su administración.
Chile tiene mujeres admirables, alguna ejercen cargos como parlamentarios, ediles, profesionales o dueñas de casa, entre las que aparentemente nos se encuentra nuestra regente. Los problemas no tienen que ver con el sexo sino que son el resultado evidente de la ineptitud.
No nos llevemos a engaño, nadie critica a la Presidente por motivaciones de género, los reproches son motivados por la escasa capacidad y conocimientos demostrados, el ningún liderazgo, las faltas de respeto a la población y sostener una agenda lejana a los problemas nacionales.
Muchos TLC, que a estas alturas suenan más a Te Le Cie, que por falta de capacidades negociadoras y nulas precauciones, poco aportan al país, además de perjudicar las posibilidades de trabajo de los cesantes. Creemos que la Gobernante se ha farreado la mitad de su periodo.
Si doña Michelle fuese realmente autocrítica, tuviese algo de patriotismo y pensase en el futuro del pueblo, la más sabia decisión que podría tomar es la de renunciar a un cargo que le ha quedado como poncho, para dar paso a personas que realmente tengan las capacidades para ejercerlo.
Chile tiene mujeres admirables, alguna ejercen cargos como parlamentarios, ediles, profesionales o dueñas de casa, entre las que aparentemente nos se encuentra nuestra regente. Los problemas no tienen que ver con el sexo sino que son el resultado evidente de la ineptitud.
No nos llevemos a engaño, nadie critica a la Presidente por motivaciones de género, los reproches son motivados por la escasa capacidad y conocimientos demostrados, el ningún liderazgo, las faltas de respeto a la población y sostener una agenda lejana a los problemas nacionales.
Muchos TLC, que a estas alturas suenan más a Te Le Cie, que por falta de capacidades negociadoras y nulas precauciones, poco aportan al país, además de perjudicar las posibilidades de trabajo de los cesantes. Creemos que la Gobernante se ha farreado la mitad de su periodo.
Si doña Michelle fuese realmente autocrítica, tuviese algo de patriotismo y pensase en el futuro del pueblo, la más sabia decisión que podría tomar es la de renunciar a un cargo que le ha quedado como poncho, para dar paso a personas que realmente tengan las capacidades para ejercerlo.
Cuándo elijamos en las proximas elecciones seamos cautos y miremos las reales capacidades de los postulantes